sábado, 30 de abril de 2011

De los “Congresos de las Américas Negras” a la Cumbre Mundial Afrodescendiente

Análisis de coyuntura/estructura 3
De los “Congresos de las Américas Negras” a la Cumbre Mundial Afrodescendiente


Tal como ocurrió hace 40 años, la Cumbre abrazaría las misma plataforma, metodología y pretensiones que en los 70s y 80s motivó los “Tres Congresos de las Américas Negras”, donde los matices del movimiento depusieron actitudes, y no dejaron que ningún gobierno o tendencia cobrara protagonismo indebido de un proceso absolutamente afrocéntrico.

Era 1977. Aun mocoso corría alegre por las calles platiníferas de Condoto arrastrando barriletes. Al caer la tarde mi tía Lola, muy paciente, me hacía leer “En Chimá nace un Santo” de Manuel Zapata Olivella. Este mismo personaje histórico de la “Negritud”, nacido en el Caribe colombiano, que instalaba en Cali el Primer Congreso de las Américas Negras.
Los años setentas fueron claves para consolidar la acción colectiva, discurso y agenda de lo que hoy es el movimiento afrodescendiente de las Américas. El mismo que está llamado a la Cumbre Mundial que ODECO convoca en el mes de agosto en La Ceiba (Honduras).
Tal como hoy, en los 70s la afrodescendencia de la región, antes llamada “negritud”, tenía matices y tendencias políticas heterogéneas. Había varios sectores alimentados por ideologías y doctrinas que iban desde las corrientes marxistas leninistas, hasta las cristianas. Igualmente los sistemas políticos estaban en un vaivén de dictaduras, golpes de estado, democracias emergentes, socialismos y derechas radicales.
Qué curioso. Las circunstancias políticas de hace cuarenta años en la Región parecen no haber cambiado mucho. Como tampoco los desafíos de la afrodescendencia que motivaron los 3 congresos de las Culturas Negras de las Américas.
Los tres Congresos convocaron a todas las posturas del movimiento afrodescendiente, independientemente de la nacionalidad de sus delegados, de sus posiciones políticas y de sus intereses. Había un consenso fundamental sobre la necesidad de debatir sobre el reconocimiento de la exclusión, opresión, negación ciudadana y discriminación que vivía el pueblo afrodescendiente. También fue la oportunidad del encuentro, disenso y consenso.
El primer congreso fue convocado por la Fundación Colombiana de Investigaciones Folklóricas, liderada por Zapata. Este congreso se efectuó en Cali, Colombia, en agosto de 1977. Asistieron más de 300 delegados de toda la región. Fueron más de 40 conferencias.
Se disertó a cerca de las condiciones de la afrodescendencia en la colonia y la república. Se analizaron los aportes al desarrollo cultural de América y las distintas formas vigentes de discriminación. Pero también se dio el debate conceptual sobre la relación entre etnia y clase. Y se cuestionó la tesis izquierdista y del movimiento popular que sostenía que en el capitalismo las contradicciones sociales son solo estimuladas por cuestiones de ricos y pobres, de oprimidos y opresores, antes de que la raza y el racismo.
El Segundo Congreso fue celebrado en Panamá el 17 de marzo de 1980. Fue convocado por el Centro de Estudios Afropanameños CEDEAP, liderado por Gerardo Maloney. Esta vez los 400 delegados incluyeron no solo la región, sino al Caribe, África y Europa.
Las setentas ponencias versaron sobre la raza y la clase, los sistemas educativos, el pluralismo cultural, la unidad nacional del movimiento. Pero sobre todo se pretendió valorar la presencia afrodescendiente en las Américas, destacando el papel de las mujeres.
Entre las conclusiones del Segundo Congreso sobresalió la necesidad de evitar que el movimiento afrodescendiente se automargine de los grandes debates nacionales y regionales. En ese sentido el Congreso se pronunció solidariamente sobre las luchas por la autodeterminación de Puerto Rico, Belice, Martinica, Guadalupe. Así mismo condenó la acción racista del Ku Kux Klan y de los escuadrones de la muerte en Brasil.
Sao Paulo fue la sede del tercer Congreso, el cual se celebró en agosto de 1982. Esta vez la convocatoria estuvo a cargo de Abdías Do Nascimento. El tema central del evento fue: "Diáspora africana: conciencia política y cultura africana", lo que convocó a medio millar de entidades y organizaciones, intelectuales, artistas y científicos, y muchos sectores sociales afrodescendientes y africanos de América, África y Europa
Este congreso fue más allá de la problemática social afrodescendiente en América. Se ahondó en la necesidad de solidaridad con los pueblos palestinos, Namibia, el Congreso Nacional Africano. Así mismo, se trazaron estrategias académicas, científicas y culturales para posicionar la historia de la diáspora africana ante la hegemonía colonialista de la historia y la cultura euro céntrica. En suma, los tres congresos fueron anticolonialistas.
Para este mes de agosto de 2011 bajo la responsabilidad de la ODECO, se ha convocado a la Cumbre Mundial Afrodescendiente. Evento que quizá no se llame “V Congreso de las Américas Negras”, pero que a mi modo de ver abraza las misma plataforma ideológica, metodología y pretensiones que desde los 70s los distintos matices de las organizaciones han trazado las tendencias del movimiento social afrodescendiente.
Es natural que la convocatoria a esta Cumbre provoque reacciones diversas alimentadas por los escenarios del contexto geopolítico y por los intereses específicos de las audiencias.
La cuestión está en que debemos ser muy creativos, cuidadosos y asépticos para que ninguna situación política de gobierno alguno, y menos el de Honduras que está en el ojo del huracán de los derechos humanos (como quizá otros regímenes) se apropien y saquen provecho político a un esfuerzo afrocéntrico que es consecuente con el estilo de acción colectiva y de repertorio del movimiento. Al menos yo creo que este es el escenario.

John Antón Sánchez
Doctor en Ciencias Sociales-Flacso
Quito, abril 30 de 2011.